Hecatombe. Del latín HECATOMBE y esta del griego ἑκατόμβη ‘sacrificio de cien bueyes u otras reses’, compuesta de ἑκατ ‘ciento’ (correspondencia griega del latín CENTUM) y όμβη ‘buey’.
Hermano. Del latín [FRATER] GERMĀNUS ‘hermano carnal’. Cuenta Corominas
que «ya en la Edad de Oro latina se halla frater germanus para indicar el hermano que lo era de
padre y madre, por oposición al medio hermano o al hermanastro, y ya entonces
empiezan a hallarse también los primeros ejemplos de germanus, solo y sustantivado, como equivalente de frater, y aun extendido al hermano paterno o uterino: así ya alguna vez en
Virgilio y en Cornelio Nepote. En el bajo latín este uso ganó terreno, y no
sólo en la Península Ibérica, sino también en Italia, donde en los documentos
de los ss. VIII a XII germanus y germana predominan ampliamente sobre frater y sopor; en Italia se produjo
más tarde una reacción que condujo al predominio completo de fratello y sorella en el idioma literario y en la gran mayoría de los dialectos, aunque hoy
todavía se conserva el uso de germanus en ciertas hablas lombardas, y existen huellas de tal uso en los antiguos
dialectos de Génova y de Módena (…) Sólo en la Península Ibérica fue completo
el triunfo de este vocablo, cuyo descendiente es de uso general (..). La
hipótesis de que la sustitución de frater por germanus se debe al deseo de evitar el equívoco que creaba la acepción ‘monje’
tomada por aquél, no es segura ni fácil de demostrar…».
Hiena. Del latín HYAENA y este del griego ὕαινα ‘cerdo’.
Hígado. Del latín vulgar FICĂTUM, del latín clásico [IECUR]
FICĀTUM ‘[hígado] alimentado con higos’. Esta denominación se explica por
la costumbre de los antiguos de alimentar con higos a los animales cuyo hígado
se comía.
Histérico. Del latín HYSTERĬCUS y este del griego ὑστερικός ‘relativo a la matriz’, por atribuírsele antiguamente a este
órgano la causa del histerismo.